sábado, 24 de octubre de 2009

Chorizos y rateros



José Salguero Duarte
Tribuna jueves 22-10-2009
EL Faro Información

http://salgueroduarte.artelista.com/



No sé, estimada-o lector, si usted sentirá tantas o más náuseas que yo, al no poder digerir a la cantidad de presuntos chorizos y rateros existentes en la política española. Ya que los límites razonables han sobrepasado con crece lo inimaginablemente correcto, de acuerdo al ordenamiento jurídico. Como ha ocurrido hace unas horas en El Ejido (Almería), con la detención del alcalde y una veintena más de implicados en las presuntas corruptelas destapadas por la policía en el caso Poniente, siendo acusados de malversación de caudales públicos, cohecho, blanqueo de dinero...

Creo, que determinada práctica política española, un día sí y el otro también, como ha quedado más que demostrado en este corrupto periodo constitucional español, atenta seriamente contra la salud de la población y de la estabilidad de la democracia, porque, cuando la inmensa mayoría de las clases trabajadoras laboran de sol al sol para poder subsistir, manadas de corralitos políticos, de familiares y de allegados, presuntamente se enriquecieron y se enriquecen sin pudor y sin escrúpulos, al carecer de los valores fundamentales relativos a la ecuanimidad, moral y a la dignidad humana.

La situación política española ha llegado a tal punto de suciedad y de podredumbre, al utilizar determinados elementos el poder político y cualquier otro a su alcance, como les viene en gana para el enriquecimiento directo o indirecto, así como para la financiación de sus partidos políticos, ya que posiblemente ciertas prácticas políticas de los presuntos chorizos y rateros, se pueden asemejar a las mañas mafiosas represoras, saltándose por el arco de sus triunfos, si les son necesarios, los pilares fundamentales de la ley, el orden, la libertad, justicia, igualdad y el bien común.

Políticos, señoras y señores, haberlos los hay decentes y honrados en todas las formaciones aunque, es de cajón que deban acatar por activa y por pasiva la disciplina impuesta en sus correspondientes formaciones políticas. De lo contrario, duran poco.

Quisiera, que no vieran en mis apreciaciones venganza y ni odio de tipo alguno contra la clase política ya que lo más cierto es que me llega al alma, los millones de hogares que no tienen ni para salir adelante, aumentando por día alarmantemente el hambre y la pobreza no sólo en Andalucía sino en el resto de los pueblos de España.

Sin embargo, el Gobierno español, una vez que reconoció la crisis económica, desparramó millones de euros para favorecer a la banca y al capital en vez de al pueblo que lo sustenta, alejándose Rodríguez Zapatero y todas sus ejecutivas socialistas regionalistas y localistas salvo raras excepciones de su lema político, social y obrero.

Pero si el Gobierno socialista navega sin rumbo haciendo aguas por todas partes, siendo cuestionado hasta por sus distinguidos barones, como es el caso reciente de Carlos Solchaga, la oposición política del PP de Mariano Rajoy da asco, por la mucha mierda y podredumbre que presuntamente resuma internamente.

Las declaraciones que observé en las horas previas y posteriores de la destitución de Ricardo Costa, con semblantes desencajados y manifestaciones salidas de tono fueron propias de escupir para arriba para zanjar el posible hedor que les impregna, e intentar tapar lo que la opinión española se imagina.

Porque, el caso Gürtel al parecer no trata de simples pelotazos y extralimitaciones rateras ya que presuntamente han mangado a manos llenas durante años. No siendo extraño que en su día Alfonso Guerra aconsejara al fiscal que “solicitara la lista de invitados de boda de la hija del otro, que ahí están todos”.

Y de referirse al ex presidente del Gobierno del PP José María Aznar, aún esa criatura nacida y afín al triste pasado político fascista español, aparece en manifestaciones y en foros alardeando de no sé qué, a pesar de los crímenes de la guerra de Irak que lleva a sus espaldas.