jueves, 1 de septiembre de 2011
Antidemocrática reforma de la Constitución Española
Zapatero y Rajoy se unen para reformar la Constitucióm Española
“Alzo mi voz sin perder las formas, contra el atentado
que se va a cometer contra la democracia española”
José Salguero Duarte
Jueves 1 septiembre 2011
http://salgueroduarte.artelista.com/
Al carecer de afiliación política y religiosa, la Constitución Española era para mi, lo mismo que la Biblia lo es para los cristianos y el Corán para los musulmanes. Ya que, en algo por imperativo legal español debo profesar.
Porque, según el artículo primero del Título Preliminar de la Carta Magna o Ley de leyes: “España se constituye en un Estado social y democrático de Derecho, que propugna como valores superiores de su ordenamiento jurídico la libertad, la igualdad y el pluralismo político".
Y, como en el apartado segundo de este artículo dice también que: “La soberanía nacional reside en el pueblo español, del que emanan los poderes del Estado". No me cabe la menor duda, que los poderes políticos que ostentan desde hace años, en las más altas instituciones del Estado español, tanto al presidente del Gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero, como el líder de la oposición Mariano Rajoy, les han manado procedentes de la soberanía popular residente en los pueblos españoles.
Por lo tanto, de llevarse a cabo esa reforma express de la Constitución, saltándose por las bravas parte de lo reglamentado. Tengo que alzar mi voz sin perder las formas democráticas. Por el grave atentado que van a cometer contra el estado de derecho constitucional español.
Siendo los principales culpables de tal atropello, el presidente actual del Gobierno español del Partido Socialista Obrero Español, José Luis Rodríguez Zapatero. Así como el líder de la oposición del Partido Popular, Mariano Rajoy. Y sus legiones de sincrónicos políticos de altos y bajos vuelos.
Porque, si el apartado primero del artículo noveno de la referida constitución dice: “Los ciudadanos y los poderes públicos están sujetos a la Constitución y al resto del ordenamiento jurídico".
Pienso, que desde el primer ciudadano español y hasta el último debemos acatar la misma. Por consiguiente, la reforma de la Constitución Española, debe realizarse de acuerdo a lo estipulado en los artículos 87, así como en los artículos comprendidos en el Título X, que trata sobre la Reforma de la Constitución. Diciendo el apartado tercero del artículo 168 entre otras cosas lo siguiente: “Aprobada la reforma por las Cortes Generales, será sometida a referéndum para su ratificación".
Consecuentemente, tras los trámites correspondientes que se están llevando a cabo, con una extrema e inusual urgencia política. Deben realizarse dicha reforma totalmente acorde a lo que hay reglamentado sobre el referéndum, para que el pueblo pueda expresarse libremente.
De lo contrario, si se le silencia la voz al pueblo español. Es obvio y evidente que nuestras autoridades no actúan democráticamente, sino todo lo contrario con actitudes propias de dictadores fascistas.
Porque, si ellos proclaman a los cuatro vientos, que esa reforma es por el bien de España. ¿Cuál es el temor y el miedo que tienen?, para no dejar al pueblo que se pronuncie al respeto.
¡Cómo es posible!, que Rajoy le ayude a José Luis Rodríguez Zapatero, a que en el tiempo basura que le queda presidiendo el Gobierno español, quiera meterle ese gol al pueblo español en fuera de juego, cuando las cámaras están de vacaciones y no abrirán salvo en estos días excepcionalmente para aprobar ese pucherazo antidemocrático.
Consecuentemente, considero que son acertadas, las numerosas manifestaciones que hay convocadas contra esta arbitraria decisión atentado contra la dignidad del pueblo español. Porque, si la Constitución Española ha sido tan rígida hasta la fecha, para poder ser anulados y reformados algunos de su apartados. Entre ellos para restituir el daño y discriminación que se le hace a la mujer, teniendo el claro ejemplo en la sucesión de la Corona española.
¡Cómo es posible también!, que ahora para plasmar las bases a un techo de gastos, quieren reformar la Constitución a espaldas del pueblo. Cuando el estado del bienestar social se lo han cargado los gobernantes políticos de este sistema libertario, amoral y corrupto.
Así que, no hablen más de despilfarros y actúen, porque los que despilfarran son presuntamente bastantes gobernantes españoles. Y administren, gobiernen y dirijan a este estado federal español encubierto con honestidad y vergüenza política. Hagan tras las elecciones generales del 20 de noviembre próximo. Una profunda reforma de la Constitución definiendo en primer lugar a España territorialmente sin ambigüedades.
Prosigan por la Casa Real, por el Senado; eliminen ministerios, subsecretarias, diputaciones y cuantos cargos, puestos y entes parasitarios existen en todo este Estado de estados o, Nación de naciones y regiones llamada España.
Y, hagan una justa distribución de la riqueza. De lo contrario, la actual España va a deflagrar de tal forma, que las consecuencias serán catastróficas como ocurrió en 1936.