Toro Bravo Spain obra 1-052 de:
José Salguero Duarte,
sobre lienzo de 114 x 146 cms.
Por: José Salguero Duarte
Escritor, pintor y poeta
El Faro Información (Grupo Publicaciones del Sur)
Domingo 07-03-2010
El filósofo Ortega y Gasset dijo: “La historia del toreo está ligada a la de España, tanto que sin conocer la primera, resultará imposible comprender la segunda". Estaba tan en lo cierto, porque quien quiera cogerle el pulso a una determinada ciudad, lo podrá llevar a cabo en los festejos taurinos que se celebren en su plaza de toros.
La Tauromaquia, a lo largo de su historia ha sufrido diferentes avatares, pero no pudieron acabar con ella, al estar incrustada en las raíces más profundas del pueblo.
Pero, actualmente, la mal llamada Fiesta nacional, sufre una de las más grave crisis en todos los órdenes, debido en primer lugar al periodo tan decadente político, económico y social que atraviesa las diferentes autonomías y regiones en España.
Y, en segundo lugar, al estar cuestionada por los antitaurinos, al entender que existe maltrato animal en espectáculos cruentos y sanguinarios no acordes a los tiempos actuales. Es por lo que en estos días en el Parlament Catalunya, se esté debatiendo -corridas de toros si, o corridas de toros no-.
Puntilla obra 1-064 de:
José Salguero Duarte,
sobre lienzo de 30 x 60 cms.
En mi poemario Flores y Guerras, presentado recientemente en el edificio Kursaal de Algeciras de la Fundación Dos Orillas de la Diputación de Cádiz, en la página 65 figura el siguiente poema:
Coso sin barreras
Cabeza del negro toro,
que presides el encierro,
con pitones astifinos,
dando cornadas al centro,
a la derecha e izquierda.
Calor asfixiante en el hemiciclo,
revolotean las sanguijuelas.
Espada obra 1-056 de:
José Salguero Duarte,
óleo sobre lienzo de 60 x 73 cms.
Al ser aficionado a la Fiesta desde el toro bravo, esencia y eje principal de la Tauromaquia. Es evidente que voy a los cosos taurinos a ver en primer lugar la estampa, presencia, trapío, casta, bravura, raza… del animal y después todo lo demás.
Siendo esta circunstancia por la que en las ciudades denominadas toristas principalmente de Madrid hasta Francia, la Fiesta de los toros no ha acusado crisis alguna, permaneciendo en su máximo esplendor.
Pero, donde el toro no es el principal protagonista, sino la mano negra del hombre que manipula, contamina, prostituye a la Fiesta y por ende no respeta la integridad del animal. No me extraña que esta crisis económica se haya llevado por delante a muchísimos festejos.
Porque, al público que pasa por taquillas se les pude engañar una vez o dos veces pero no reiteradamente. Por lo tanto, los festejos taurinos descafeinados dañan gravemente la salud de la supervivencia del toro bravo y de la Tauromaquia.
Rasgos taurinos obra 1-063 de:
José Salguero Duarte,
óleo sobre lienzo de 80 x 100 cms.
En las páginas 55 y 56 del referido poemario Flores y Guerras, figura también este otro poema que escribí al que titulé y dice:
Toro Bravo
Toro bravo,
orgullo del ganadero
al contemplar tu belleza.
Los ojeadores se entusiasman,
al tú destacar en la camada.
Tiemblan los cercados,
los espacios se estrechan.
Una orgía de sangre,
en la plaza te espera.
Huyes despavorido
llueve o relampaguee.
Mármol en los panteones,
grisáceo bramar en el horizonte.
Tienes los días acotados,
y tus pulsaciones se estremecen.
Sangran irisados los verderones,
alada tiembla la fiesta.
Buenos ojos, tus ojos
que miran, callan y penan.
Sin embargo, los de ellos,
te ven agonizar en la plaza.
Toro bravo.
Orgullo del ganadero.
Natural con aroma obra 1-111 de:
José Salguero Duarte,
lienzo de 46 x 65 cms.
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