Simbolismos. Pintura de José Salguero Duarte
Van pasando los años
“Va por ustedes esta prosa poética, por una Andalucía
libre de caciques, y por una democracia real en España y no esta monarquía
parlamentaria”
José Salguero Duarte
Lunes, 22 de abril de 2013
Van pasando los años, las heridas siguen
abiertas, sin que la incandescencia del sol, que ha alumbrado sus inviernos,
haya moldeado a su bando.
Treinta y seis tristes recuerdos,
caminan con la venda en sus ojos, por las cunetas de sus barbaries,
vanagloriándose las hienas, de no haber respetado, a seres inocentes, de todas
las edades.
Van pasando los años, las heridas
siguen abiertas, sin que la incandescencia del sol, que ha alumbrado sus
inviernos, haya moldeado a su bando.
Muchedumbres sin principios, con gafas
de negras patillas, zapatos del pie derecho, con suelas de neumáticos, haciendo
las reverencias, de igual forma que los vasallos, besaron las manos de sus
amos, en los dominios maléficos, de servilismos ya desfasados.
Van pasando los años, las heridas
siguen abiertas, sin que la incandescencia del sol, que ha alumbrado sus
inviernos, haya moldeado a su bando.
Gente de malos principios, de falanges
y fascismos, de camisas blancas, azules o verdes, con música sin sones
acompasados, como los aullidos de
grandes marrajos.
Van pasando los años, las heridas siguen
abiertas, sin que la incandescencia del sol, que ha alumbrado sus inviernos,
haya moldeado a su bando.
Fustas de doble grosor, ejerciendo la
opresión impuesta, para que los caballos desbocados, relinchen en sus cobertizos,
como el penco de don Pelayo, tuerza tanto con sus desagravios, como el
desnivelado cojo manteca, de tristes recuerdos pasados.
Van pasando los años, las heridas
siguen abiertas, sin que la incandescencia del sol, que ha alumbrado sus
inviernos, haya moldeado a su bando.
Continentes y contenidos, de cuentas sin estar
saldadas, generando proclamas, pacíficas o exaltadas, en nítidas mañanas
claras, o en oscuras noches estrelladas.
Van pasando los años, las heridas
siguen abiertas, sin que la incandescencia del sol, que ha alumbrado sus
inviernos, haya moldeado a su bando.
Moneda de franco ilegal curso, entregó
a sus acólitos, cuando tocó a sus puertas, solicitándoles que lo votaran, para
que en un nuevo mandato, hacer y deshacer a sus anchas.
Van pasando los años, las heridas
siguen abiertas, sin que la incandescencia del sol, que ha alumbrado sus
inviernos, haya moldeado a su bando.
Los suyos le aplaudieron, por tal
hecho tan arbitrario, realizado por el oscuro sujeto, al utilizar el acero del
régimen, ofendiendo a la moneda vigente, de este periodo constituyente.
Van pasando los años, las heridas
siguen abiertas, sin que la incandescencia del sol, que ha alumbrado sus
inviernos, haya moldeado a su bando.
A mí me la entregó, tras depositar la papeleta
en las urnas, muy cerca de los estandartes, en presencia del bedel, y de otros concurrentes; arrojándosela al
suelo, y no a su rostro desencajado.
Los antidemócratas, de su régimen
oculto, alabaron su actitud de nuevo, a pesar de tal ofensa, utilizando el
aguilucho y la flecha, de la fascista época, de cuatro listos encebollados, y
manadas de cobardes sin principios.
Van pasando los años, las heridas siguen
abiertas, sin que la incandescencia del sol, que ha alumbrado sus inviernos,
haya moldeado a su bando.
Quiero apuntar por último, que con
motivo del aniversario, del golpe de Estado, del coronel Tejero, y del elefante
blanco; tras la disertación que hice, a la hora del ángelus, del 23 de febrero
último, ante una muchedumbre, de todas las clases sociales, del anterior y
presente sistema, exclamé un viva por la república, irritándose hasta los sometidos
de antaño, y por poco me sacan a hombros.
Van pasando los años, las heridas
siguen abiertas, sin que la incandescencia del sol, que ha alumbrado sus
inviernos, haya moldeado a su bando.
Va por ustedes, esta prosa poética, al
lobo de mar de La Vila ,
y al humanista y escritor, del Patio del Coral de Algeciras. Exclamando un
viva, por Andalucía libre de caciques, por la Tercera República ,
con una democracia real, y no esta monarquía parlamentaria del PP, PSOE, UGT y
CCOO; la Corona ,
Cristina y Corinna… que tienen al pueblo español, hasta la coronilla.
MURO
El
silencio de la muerte,
se
presentó en el muro.
Los
susurros temblaron
en
el abismo de la caza.
Esbelta
como el aire,
fría
como el mármol.
Granizos
sedientos,
agua
transparente.
Las
fuentes sucumben,
afloran
los disparos.
CARTA LIBRE
Lobos
hambrientos acechan,
en
paseos bajo la sarna.
Cárceles
sin barrotes,
los
verdugos ejecutan.
GOTAS
La
lluvia frondosa,
de
mi jardín florido,
se
tornó amarga,
al
partir sus gotas
hacia
la muerte.
MERCENARIOS
Sufro
el dolor ajeno
y
no el de mis carnes.
Patria
sin banderas
en
exilios voluntarios.
Los
mercenarios a la deriva,
alimentados
por inquinas.
Fieros
matones y pistoleros,
cobardes
conciudadanos.
Nota:
Del poemario: Muro.
Dedicado
a Muro (Soria). Lugar donde residí
y
en la soledad de las frías noches creé Muro.
(José
Salguero Duarte)