domingo, 25 de mayo de 2014

Algeciras y sus colectores de aguas fecales

 

Algeciras y sus colectores de aguas fecales

 
"En Algeciras por no haber, no hay ni depuradoras de aguas fecales”

 

 
 
José Salguero Duarte
Lunes, 12 de mayo de 2014

 

            Diariamente, cuando mis obligaciones me lo permiten, sin excusas ni pretextos. Para expulsar las nocivas toxinas para la salud, dedico más de una hora a caminar por las diferentes rutas del colesterol existentes en Algeciras. Ejercitando mi cuerpo y mente en busca de un bienestar personal. Pero como esta ciudad donde resido y donde pago los recibos e impuestos de la basura, contribución, alcantarillado, circulación de vehículos… es reducida en número de habitantes y muy cortita en otros muchos aspectos, nos conocemos de vista y de algo más todos.  

            Por ello, los andarines, somos siempre casi los mismos, dependiendo cuando se realicen las caminatas. Aunque, los hay quienes, en vez de llevar en su caja torácica un corazón con o sin marcapasos. La empresa a la que pertenecen, y a la que obedecen sin rechistar a pesar de las arbitrariedades, les ha colocado pilas alcalinas, para que den más vueltas que los tiovivos en las ferias. Salvo, cuando les toca el turno de centinela. Como puede  ser el caso de un lacero al que denomino con el sobrenombre  de ‘El cura', al que lo observo ofrecer 'misa' de paisano, hasta en una  esquina del Corte Inglés, frente al colector de aguas fecales.

            Supongo, por si por las cloacas se realizan desembarcos de `morruños' no fieles a su sistema, y los tiene que bendecir con sus hostias consagradas. Comprobando, así tan medioambiental, la contaminación excremental perruna existente. Porque perros sarnosos los hay por todos los rincones con o sin pedigrí, sin que sus dueños depuren las evacuaciones que se vierten a la redes inmundas  comunitarias o cuando defecan en las calzadas o aceras. 

            No sé qué, es lo que tienen ciertos aguafiestas políticos para bendecirlos. Porque a pesar de que se paguen los mismos o más impuestos que en la capital de los reinos Borbónicos. Aquí poca contraprestación se recibe a cambio. Porque por no haber, no hay, ni depuradora de aguas fecales. A pesar de que, casi todas las formaciones políticas, por no decir todas, durante sus legislaturas desde el comienzo de esta descafeinada y corrupta democracia, intentaron con mucha palabrería, estando en la oposición, solucionar dicha pestilencia.  

            Pero desde el poder ninguna de ellas ha hecho lo posible para solventar tanta fetidez, a pesar de que, por ahí andan las criaturas tapándose las fosas nasales. Porque cuando hay bajamar, el hedor que desprenden los colectores de la antigua playa de ‘Los Ladrillos'. Es como para que el Rey, el Gobierno central, el autonómico andaluz y el local algecireño con toda la oposición y sus cortes celestiales de saltimbanquis y panderetas. Realicen sus secciones a pecho descubierto y sin mascarillas. Para que se les cayera lagrimones pestosos, de igual forma que se nos caen a muchos viandantes cuando pasamos por allí a pié o circulando en vehículos. 

            Otro asunto que me preocupa, es el alarmante estado en que se encuentran determinadas calles y carreteras locales… al tener más boquetes que las arcas municipales de muchos ayuntamientos. Desconociendo, si en Algeciras próximamente se va a rodar una nueva versión de la película de Tarzán en la Selva. Porque hay baches y socavones como para enterrar a la ‘Chita' y a todo el zoológico político español. Aunque, es posible, que el Gobierno se saque de la manga otro ‘Plan E' como el del PSOE, para tapar tantos agujeros perjudiciales para la salud de la democracia. 

            En fin… sigo haciendo amigos sin necesidad de ello. Pero creo que, un concejal de cualquier lugar, es presuntamente más de lo mismo, que el de Cuenca o el de Madrid, independientemente de las siglas políticas a las que pertenezcan. Porque cuando están en la oposición prometen a la población hasta juntar el Cielo con la Tierra. Pero cuando alcanzan el poder se olvidan de lo prometido.
 
            Deseo, estimado lector, a través de esta ventana a la libertad de expresión, que me concede el diario independiente. Finalizar esta tribuna libre de opinión, transcribiendo un chiste que me contaron hace un tiempo, que dice así:

            “Una maestra hizo una encuesta entre sus alumnos, sobre las profesiones de sus padres. Uno le dijo que su padre era panadero, otros que eran albañiles, electricistas…

Cuando le llegó el turno a Jaimito, contestó que su padre trabajaba de noche en un club gays, donde los hombres le daban dinero y hacía el amor con ellos. La maestra, sintió tanta vergüenza que no sabía donde meterse. Pero, aprovechando que Jaimito fue al baño, preguntó a los alumnos si era verdad lo que Jaimito había dicho sobre la profesión de su padre. Contestándole uno de ellos, --¡qué va, señorita!, porque su padre es político desde hace treinta años y le da vergüenza decirlo--".