lunes, 2 de mayo de 2011

Manzanares y Arrojado (poema)


José María Manzanares y el toro Arrojado,
indultado en la Maestranza de Sevilla 30-IV-2011

Manzanares y Arrojado



Autor poema y dibujo: José Salguero Duarte
Algeciras,1 mayo 2011


En la Real Maestranza de Sevilla,
en la tarde del 30 de abril de 2011.

Hicieron el paseíllo tres toreros de arte:
Julio Aparicio, Morante de la Puebla
y José María Manzanares.

La plaza estaba de bote en bote,
esperando a que surgiera la chispa,
con el duende de los maestros,
y la bravura de las reses,
de Núñez del Cuvillo.

Tras unos ramalazos de azahar y romero,
en los dos primeros de la tarde.
Saltó al ruedo, Arrojado,
con 500 kilos de peso,
y con el número 217 grabado,
a sangre y fuego en los lomos.

Inicialmente cumplió con su cometido,
pero en el último tercio de la lidia,
acudía a la muleta en las primeras tandas
de José María Manzanares,
con fijeza, nobleza y casta.

Iniciándose una sinfonía torera,
con las genialidades del alicantino,
y la esencia brava del morlaco.

Todo era temple, pureza y armonía;
rugiendo los aficionados,
cuando Arrojado embestía y embestía,
rozando los hocicos por el albero.

Una obra, única en esta plaza,
creada por el joven maestro Manzanares
y el toro de Núñez del Cuvillo,
que quedará para los anales de la historia.


Alcanzando ambos la gloria.
El torero salió por la Puerta del Príncipe.
Y el toro volvió a la dehesa,
donde fue recibido por un harén de vacas bravas.

Bienvenido, sea el indulto para la Fiesta,
porque fue como fina agua de lluvia,
brotada en los manantiales
de la Real Maestranza de Sevilla,
triunfando la Tauromaquia.


José Salguero Duarte y José María Manzanares