Soberbia tarde de Miguel Ángel Perera en la séptima de Las Ventas de Madrid

 

 

“Perera estuvo a un suspiro de abrir la Puerta Grande,
Ángel Teruel anduvo bien con el de su confirmación
y a Sebastián Castella le tocó el peor lote”

 

 

 

 

 

 

 

 

Crónica: José Salguero Duarte
Fotos: Iván de Andrés(Web:www.desdelcallejon.com)
Madrid, 15 de mayo 2013

 Con media hora de retraso del horario anunciado, debido al acondicionamiento del piso de plaza con motivo de la lluvia caída, comenzó la séptima del abono de San Isidro, con lleno en los tendidos.
Se lidiaron reses de la prestigiosa ganadería de Alcurrucén bien presentadas y de juego desigual para Sebastian Castella (silencio en ambos), Miguel Ángel Perera (oreja con petición de la segunda y fuerte petición que no le fue concedida recibiendo una gran ovación) y Ángel Teruel que confirmaba la alternativa (ovación con saludos y silencio). A Castella le tocó el peor lote de la tarde, a Miguel Ángel Perera dos reses complicadas y a Ángel Teruel el mejor del encierro que fue el de su confirmación, gustándome también el sexto pero…

Tanto Miguel Ángel Perera como Joselito Gutiérrez se libraron en el segundo de la tarde de haber sufrido graves percances.

Ambel de la cuadrilla de Castella como Joselito Gutiérrez de la de Perera se desmonteraron en el tercio de banderillas.

 

 

—Espadas 

 

Ángel Teruel, a su primero 237 de nombre `Pandero’, lo intentó con el capote pero sin nada a destacar. Lo puso al caballo y el toro hizo una buena pelea en sendos puyazos. En banderillas lidió bien Fernando Téllez.

Se procedió a la ceremonia de entrega de trastos en la confirmación por parte de Castella a Teruel, estando de testigo Perera. La faena de muleta la brindó al respetable y se dobló con el toro, cumpliendo ambas partes acorde a lo común en esta fase. Prosiguió sacándole buenas tandas por ambos pitones embistiendo el de Alcurrucén con mucha nobleza, humillando y hasta haciendo el avión. Si vende de otra forma la faena le corta la oreja tras la casi entera que le pegó, tragándose el toro muy bravamente la muerte tardando en echarse, siendo aplaudido en el arrastre y el torero recibió una ovación que recogió desde el tercio.

Sebastián Castella, al segundo en orden de lidia de nombre ‘Pianero’ de 530 kilogramos, lo lanceó siendo lo mejor la media en el remate. Lo puso al caballo y el toro se arrancó de largo al peto. En banderillas Ambel se desmonteró recibiendo una gran ovación. Tras la devolución de los trastos de la ceremonia de confirmación, el maestro francés le enjaretó una buena tanda ligando, pero el toro a la siguiente perdió el brío de su piano embistiendo más sosamente que un guiso sin sal.

Miguel Ángel Perera, a ‘Peladito’ número 168 de 510 kilogramos, cuando se preparaba para estirarse con el capote perdió pie cayendo al albero, dándole un lance con una mano para que no lo cogiera, pero fue pisoteado al no acometer el toro con saña contra el diestro. En banderillas se desmonteró Joselito Gutiérrez tras su buena actuación con los palos, quedando a la salida del segundo a merced del toro en el suelo librándose de sufrir un grave percance. Con la muleta el maestro Perera le plantó cara al de Alcurrucén instrumentándole una buena y vibrante tanda sonando los olés y las palmas con mucha fuerza. Prosiguió con su maestría y oficio citando, templando y mandando bajando las manos con muletazos largos y profundos. Tras finiquitarlo le fue concedía una oreja con petición de la segunda que no concedió el usía.

 

Sebastián Castella, a su segundo y cuarto de lidia de nombre ‘Altamares’, con el capote no hubo nada a destacar al no permitirlo el toro. En el caballo cumplió y al percatarse que le estaban dando leña salió najando lejos del caballo. Posteriormente entró de nuevo al peto y se empleó lo justo. La faena de muleta la comenzó doblándose con el toro flexionando las rodillas, pero el toro no embestía con la acometividad necesaria. Posteriormente el oficio de Castella le sacó varias tandas a media altura al no humillar el toro sin apenas transmitir lo necesario para evitar el bostezo en los tendidos.

Miguel Ángel Perera, el quinto de la tarde el colorao número 22 de nombre ‘Ambicioso’, hizo en el capote lo mismo que el resto de sus hermanos o hermanastros. Tras los trámites de las dos siguientes suertes (varas y banderillas), el maestro Perera brindó la faena de muleta al público, colocando la montera entre las rayas de picar y más cerca de la segunda. Sacó al toro hasta el centro del anillo y allí como hacen los grandes clavó las zapatillas en el albero y en cada arrancada y muletazo comenzó a tragar embestidas inciertas siendo muy aplaudido. Posteriormente lo fue metiendo en su cesto embarcándolo con mucha torería y firmeza, pero al toro había que poderle, siendo muy interesante la ultima fase de la faena al calar con su torería y casta en los tendidos. El toro tenia un majao bastante considerable pero Perera le sacó todo y más de lo que llevaba dentro. Tras estocada algo trasera le pidieron la oreja que no concedió el presidente.

Lástima.

Ángel Teruel, cerró plaza con el marcado con el número 14 de 510 kilogramos de nombre ‘Herrerito’. Tras el primer tercio de capote sin nada a destacar, en el caballo le pegaron dos puyazos a este flamencón y chulapo. En la faena de muleta el torero lo intentó por ambos pitones pero había que pelearse o plantarle cara al de Alcurrucén para dar otras sensaciones y sacarle lo mucho o poco que llevara dentro. Aunque, el joven diestro estuvo muy digno en el día de su confirmación. Media casi entera y descabello, silencio.