Griñán huye de la
presidencia de la Junta
de Andalucía
José Salguero Duarte
(Lunes, 29 de
julio 2013)
José Antonio Griñán, fue nombrado a dedo por su
antecesor en el cargo, Manuel Chaves. Y desde 2009 viene ejerciendo como
presidente de la Junta
de Andalucía. Pero en el año aproximado que ha transcurrido de esta legislatura
autonómica andaluza, ejerce como presidente de la Junta , gracias al pacto de
gobierno que llevó a cabo el PSOE con
Izquierda Unida.
Chaves y Griñán, creo que son
presuntamente de la misma o parecida escuela política. Y al poseer muchos
ingredientes comunes pueden ser ‘tal para cual’. Por ello, ahora, Griñán en una
maniobra ‘democrática’, muy similar a la que realizó su antecesor para que
fuera nombrado él presidente de la
Junta , acelera su sucesión en el cargo, pillando fuera de
juego al resto de las corrientes socialistas. Con el único objetivo, de colocar
a su delfina política, Susana Díaz, en la poltrona andaluza del Palacio de San
Telmo. Cortijo político andaluz, al que bauticé hace años como el Palacio de ‘San Timo’. Desde donde
Griñán ha pasado el rodillo del ordeno y mando, debiendo la militancia acatar
sin rechistar la disciplina impuesta, porque el que se mueva contrariamente, a
esta decisión sucesoria ‘democrática’, no sale en foto alguna.
La apresurada huida de Griñán de la
presidencia de la Junta
de Andalucía, era esperada por mí, porque posee presuntamente desde hace años
casi todas las papeletas, para que próximamente sea citado a declarar ante la Justicia , sobre unos de
los mayores presuntos saqueos de las arcas públicas, llevado a cabo a través de
la presunta trama corrupta de los ERE falsos de Andalucía.
No creyéndome, de ninguna de las
maneras, los argumentos esgrimidos por Griñán, acerca de su marcha de la presidencia
de la Junta a
finales de agosto próximo. Porque políticamente creo que presuntamente no ha
sido ‘trigo limpio’. Y cabe la posibilidad, de que mienta, al ser una presunta
práctica habitual en políticos como él y
no sólo del PSOE sino del resto de las diferentes siglas.
Supongo, que José Antonio Griñán, como
no sabrá hacer otra cosa que ejercer de político a grandes alturas con
chóferes, secretarias-os y maleteros. Debido a que la Justicia vuela sobre el
nido de algunos presuntos cucos de la
Junta de Andalucía. No tiene intención, don Pepe, de dejar la
política activa. Habiendo anunciado a bombo y platillos, que proseguirá al
mando de la presidencia nacional y de la Secretaria General
andaluza del PSOE.
Pero mucho me temo, que el PSOE para
premiar los servicios prestados al partido, lo podría nombrar hasta senador
para que siga siendo aforado. Pero si eso es imposible, lo podrían colocar en
un puesto similar como el que tiene actualmente la exministra socialista,
Magdalena Álvarez, en el Banco Europeo de Inversiones.
Andalucía, estimado lector, ha sido el
semillero de votos del PSOE. Y si la mayoría de los sociatas, en los cuarentas
años de democracia transcurridos, hubieran defendido mínimamente a esta
comunidad histórica como lo hacen con las suyas catalanes y vasco. España, sin
duda alguna, se hubiera gobernado desde Andalucía y no desde Madrid, el País
Vasco o Cataluña.
Por ello, los andaluces tenemos lo que
nos merecemos, al haber sido gobernados como lo han hecho tan mal los
socialistas desde que falleciera el dictador Franco. Encontrándonos en todos
los sentidos, en el vagón de cola de Europa, por culpa de sus perjudiciales
gestiones realizadas. Dejando a Andalucía como una comunidad de servicios para
el resto de España y de Europa…
Y es así, como lo creo, pienso y
expreso, porque, además, los andaluces estamos sufriendo dos dictaduras
consecutivas: la genocida del tirano Francisco Franco y la ‘democrática’ del Partido Socialista
Obrero Español. Por ello, si “tanto monta Isabel como Fernando”. Me avergüenzo
como andaluz que soy de pura cepa, de que José Antonio Griñán haya sido hasta
la fecha, columna vertebral o estandarte del PSOE. Porque él, así como otros
barones y altos cargos socialistas. De socialistas tenían y tienen poco, pero de
obreros mucho menos, al ser y desempeñar presuntamente el papel caduco,
trasnochado y rancio de señorito andaluz.
A Griñán, lo tenía más calado
políticamente que a un melón agrio. Y la forma ‘democrática’ adoptada para ser
sustituido, habrá supuesto una verdadera desilusión, para los militantes y
válidos jóvenes políticos del PSOE, que intentan llevar a cabo una profunda
renovación del partido. Pero luchar con un par contra el oficialismo lo hacen
pocos. Por eso, cada día admiro más a Sánchez Gordillo y a Diego Cañamero.
Consecuentemente, en Andalucía, “el volver a ser lo que fuimos”, no depende
exclusivamente de los políticos, sino del pueblo andaluz, una vez que despierte
de la anestesia, a la que nefastos políticos sinsustancias de media rosca lo tienen
sometido.
Y despertar, deberá hacerlo España
entera, porque, de nuevo, otra tragedia se produjo con el terrible accidente de
tren ocurrido el 25 de julio pasado en Santiago de Compostela. Por lo que
transmito mi más sincero pésame a los familiares de las 79 víctimas mortales
hasta la fecha y al resto de los accidentados.
Deseando que por la dignidad humana,
cívica y política española, se esclarezca cuanto antes la verdadera causa que
motivara dicho descarrilamiento. Estando totalmente en contra, de todos los que
incriminaron al maquinista como único culpable desde el primer momento de
producirse dicha tragedia, porque hay mucho
en juego... Por ello, me resultan maquiavélicas y malvadas ciertas declaraciones
efectuadas, así como las publicaciones aparecidas en determinados panfletos
periodísticos propagandísticos afines al régimen del Gobierno actual del PP en
ese sentido, cuando aún no ha finalizado todas las investigaciones a realizar.
Viniéndose a la mente los entresijos que ocurrieron tras el accidente aéreo del
Yak-42.
Así que ¡Ojo!, porque en aquella
ocasión el PP no estuvo a la altura de las circunstancias. Y aún colea ciertas
actuaciones indignantes llevadas a cabo por el PP de Federico Trillo y compañía.